El peor de los terrores de la redacción cinéfila de El País podría hacerse realidad, Herr Müller amenaza con quedarse.
Pues sí, parece que el amado y odiado Marco Müller, el más vilipendiado por el sector cavernícola de nuestra crítica nacional, podría repetir mandato al frente del Festival de Venecia. «Pero ¿no estaba limitada a dos periodos de cuatro años la dirección del certamen italiano?» pensarán algunos. Pues sí, pero parece que el Presidente entrante de la Biennale (la gran exposición cultural del Véneto y de la cual el Festival es sólo una parte), Giulio Malgara, tendría todas las intenciones de que Müller continuara al frente de la Mostra pero todo, como sucede habitualmente en Italia, está pendiente de un hilo puesto que Malgara debe ser confirmado en su puesto por un Parlamento tan tambaleante como el propio gobierno Berlusconi.
Suponemos que son días de incertidumbre para alguna egregia figura de la crítica cinematográfica patria que se debatirá en la duda de preferir la continuidad de Müller, y verse obligado así a la terrible tortura que debe suponer ver cine de otras nacionalidades (además de la que ustedes saben) y que habitualmente no tiene cabida en las salas comerciales, o de preferir su marcha con lo cual tendría que dedicar la columna diaria a (¡oh, fatalidad!) hablar de cine y no ocupar más de la mitad de ésta con los floridos epítetos habituales dedicados a la labor del amigo Marco.
¿Es o no es una incertidumbre desgarradora?
Fuente: http://www.hollywoodreporter.com
Vaya, a partir de ahora no va a ser Tetro lo único que le ponga triste a nuestro amigo.
Pobre Carlos, este disgusto no se lo quita ni una versión Redux de El buscavidas