Crítica de Batman: Año Uno, adaptación de animación del cómic de Frank Miller del mismo título dirigida por Lauren Montgomery y Sam Liu y estrenada en DVD.
La primera película de Batman dirigida por Christopher Nolan, Batman Begins, tenía un referente claro. Era el cómic Batman: Year One, escrito por Frank Miller. Probablemente sea lo mejor que ha escrito Frank Miller en toda su carrera junto a su otra historia sobre Batman, The Dark Knight Returns, sus acercamientos al personaje de Daredevil y algún relato de Sin City. El caso es que Christopher Nolan quiso coger el tono de ese cómic y ahora lo han heredado varias películas del personaje. El año pasado tuvimos otra película de Batman de animación, Batman: Under the Reed Hood, que debo decir que me gustó bastante y que ya se notaba como había recogido las semillas sembradas por Nolan, aunque por suerte el director también ofrecía algo más que eso y nos entregó un producto ágil, oscuro y violento.
La adaptación de Batman: Year One partía con dos principales problemas: el primero de ellos es la inevitable comparación de la película con el cómic de Miller mientras el segundo problema es condensar en una hora de película todo lo que Miller contó en el cómic. En lo primero queda por debajo, es algo lógico siendo el nivel del cómic tan alto. Aunque en esta adaptación nos encontramos con una obra respetuosa, quizá a veces le falte la intensidad del cómic, pero todo está bien plasmado. Mientras que el segundo problema tanto Lauren Montgomery como Sam Liu lo solucionan bastante bien, sirve como un resumen bastante competente del cómic.
Batman Year One nos cuenta los inicios en Gotham City tanto de Bruce Wayne como de James Gordon. Vemos como el primero poco a poco se va convirtiendo en Batman, aunque le queda aún mucho por mejorar, y como el segundo tiene que luchar contra la corrupción e intentar detener a Batman, antes que exista cierta complicidad entre ellos SPOILER aunque al final el teniente Gordon le deba mucho por salvarle al hijo FIN SPOILER. Los directores no dejan de lado temas como la infidelidad de Gordon, el personaje de Selina –Catwoman-, que tiene una buena pelea con Bruce y ya comienza a robar, o la corta aparición de Harvey Dent, del que Gordon llega a creer que puede ser Batman.
Lauren Montgomery y Sam Liu, expertos en dirigir películas de animación de superhéroes, realizan un buen trabajo, consiguen un par de escenas muy interesantes -el asalto en el edificio, probablemente la escena más alargada, está muy bien- y relatan con acierto todo ese año en el poco tiempo que tienen. A veces puede pecar de apresurada pero es comprensible. Es una película, pese a lo mencionado anteriormente, sosegada, como el cómic, con un nivel en la animación conseguido, que retrata bien la ciudad de Gotham y toda su corrupción. También saben los directores dividir con acierto el protagonismo entre Gordon y Batman. Buen nivel también en las voces de los personajes de esta adaptación a cargo de actores como Bryan Cranston (Gordon) o Eliza Dushku (Selina). La película está acompañada por un cortometraje sobre Catwoman dirigido por Lauren Montgomery que tiene su punto. En poco más de 14 minutos tiene la suficiente acción y sensualidad para ser un digno trabajo sobre ese personaje, dirigido con elegancia y buen gusto. Desde luego es mejor como la vemos aquí que las representaciones que ha tenido este personaje en el cine.
