El single de debut de The Jesus and Mary Chain, Upside Down, abre y da título al documental sobre el sello independiente británico Creation Records. A cargo de su creador, el músico escocés Alan McGee, y de sus compañeros en la discográfica, así como de varios de los artistas que pasaron por allí, Upside Down va narrando la creación, el auge y la caída de Creation Records durante sus 16 años de andadura.
A finales de los años 70 en plena era post punk, el escocés Alan McGee conoció al músico Bobby Gillespie en un concierto de Thin Lizzy, y juntos comenzaron una carrera musical, influenciados por Sex Pistols o The Clash, pero pronto empezaron a desarrollar sus carreras por separado, Gillespie entrando a formar parte de The Jesus and Mary Chain, y más tarde encabezando el grupo de rock psicodélico Primal Scream. McGee por su parte decidió crear un sello discográfico junto a dos de los componentes de TV Personalities, en un primer momento para dar conciertos pequeños en los que, todo lo que ganaba se lo gastaba en fiestas y borracheras, por lo que decidió convertirlo en discográfica exclusivamente para lanzar discos “por una cuestión de ética protestante de trabajo”.
De Creation Records salieron durante todos esos años, grupos tan importantes como los ya mencionados Primal Scream, My Bloody Valentine o Ride, a quienes McGee robó a Warner a base de seguirles a todos los conciertos. Durante varios años, Creation Records fue el referente para todos los grupos indies y minoritarios de la escena británica, “Creation Records es la Capilla Sixtina del rock moderno” diría Neil Hannon de The Divine Comedy, buscando además nuevos sonidos para incorporarlos al rock, como el cambio de estilo que sufrieron Primal Scream con la irrupción del Acid House. Todo en Creation era una fiesta salvaje en la que, literalmente se desayunaba todos los días con éxtasis, y que llevó a McGee prácticamente a la bancarrota, teniendo que venderla a Sony.
Y entonces llegó Oasis…
La llegada del grupo más importante de la escena brit pop y la coincidencia en el tiempo de la experiencia cercana a la muerte de McGee por el exceso de drogas, fueron un punto de inflexión en la historia de la discográfica que les hizo salir de la ruina de una manera fulminante pero también fue el fin de Creation Records como sello independiente al tomar Sony las riendas del mismo y gestionar todas las ganancias que Oasis reportaba.
Upside Down recorre toda la historia del sello paso a paso, intercalando actuaciones de la mayor parte de los grupos que por allí pasaron, con entrevistas a sus miembros y, por supuesto, a Alan McGee ya casi totalmente recuperado de sus adicciones. A pesar de sus 101 minutos de metraje, que pudieran parecer excesivos para un documental de estas características, en ningún momento pierde una pizca de interés por el dinamismo que aporta el montaje de la película del debutante Danny O’Connor, acrecentado por la personalidad arrolladora de McGee, quien no sólo nos va contando la historia de su sello, sino que además relata sin ningún tipo de censura sus experiencias y las de todo el que por allí pasaba con las drogas, arremetiendo además contra aquellos que desvirtuaron el espíritu con el que se creó Creation Records (léase Oasis como “cabezas de cartel” de dicha desvirtuación).
La virtud de la película es la de llevar al espectador por todas las fases por las que pasó la discográfica a través de sus protagonistas, consiguiendo que se identifique con las ideas y el espíritu independiente de la misma y haciendo del documental un documento imprescindible para entender y disfrutar de lo que fue la escena independiente británica en los años 80 y 90.
XTRMNTR de Primal Scream fue el último álbum que Creation Records publicó antes de cerrar en noviembre de 1999. Fiel a sus principios de meter en la escena musical del Reino Unido a todos aquellos grupos y artistas minoritarios y alternativos, la conversión de Creation en un pequeño recodo de una gran multinacional fue la puntilla para que McGee decidiera que ese no era el camino por el que quería llevar su negocio cuando lo creó allá por el 83 y cerró para siempre.
Como sentencia Gruff Rhys de Super Furry Animals: «Nostradamus predijo el fin de la Creación a finales de 1999, pero no se refería a la humanidad sino a un pequeño sello musical independiente llamado Creation.»