26 de abril de 2024

Estudio Billy Wilder (V): Some Like It Hot

Hoy hablamos sobre este travestido clásico, considerada la mejor comedia americana de todos los tiempos por la American Film Institute.

Some Like It Hot cuenta la historia de Joe (Jack Lemmon) y Jerry (Tony Curtis), dos músicos de jazz que sin querer presencian los famosos asesinatos del Día de San Valentín en Chicago. Aterrorizados con la idea de ser asesinados por los secuaces de un mafioso (George Raft) aceptan un trabajo en una banda femenina que viaja rumbo a Florida a tocar en una conferencia y en la que tendrán que travestirse y fingir ser mujeres para salvar el pellejo. Joe y Jerry, ya transformados en  Josephine y Daphne, sufrirán toda clase de altercados al intentar Jerry conquistar a la cantante del grupo (Marylin Monroe) y el empeño de un chiflado millonario (Joe E. Brown) por ligarse a Josephine, mientras son perseguidos por unos peligrosos miembros de la mafia.

"¿Qué ha pasado?". "Me he prometido". "¡Te felicito!. ¿Quién es la afortunada?". "Soy yo"

Chicago. 1929. La ley seca. La funeraria-discoteca. Joe y Jerry. La masacre de San Valentín. La estación de ferrocarril. Josephine y Daphne. «Me siento desnudo». Marilyn y el vapor. La dieta baja en azúcar. El camarote de los hermanos Marx. Los manhattan a hurtadillas.

Florida. La pesca del millonario. «En invierno, todos emigran hacia el sur. ¡Como los pájaros!». Marilyn y el ukelele. El yate. El millonario falso y el verdadero. Los botines de Columbo. Los diamantes que valen su peso en oro. La conferencia de amantes de la opera. Las transparencias de Marilyn. Osgood. Las maracas. «¿Por qué querría un tío casarse con otro tío? ¡Seguridad!». El pastel con sorpresa. La lancha y el «Bueno, nadie es perfecto».

"¿Cómo pueden andar con ésto?. Me siento desnudo. Como si todo el mundo me estuviera mirando". "¿Con esas piernas?. ¿Estás loco?".

Some like it hot (A algunos le gusta caliente, título que por obvias referencias sexuales acabó traduciéndose por Con faldas y a lo loco) es quizás la película más conocida de Billy Wilder, y el primer gran éxito de su colaboración con I.A.L Diamond, del que no se separaría hasta la muerte de éste en 1988. La película sería nominada a seis premios Oscar, del que solo ganaría el de vestuario en blanco y negro (fue el año de Ben-Hur, película de la que Wilder echaría pestes hasta el fín de sus días, no sin cierto resquemor). Wilder renunció a rodarla en color, técnica que empezaba a ser la más común en Hollywood, ante el miedo de que el maquillaje de Lemmon y Curtis fuera demasiado evidente e influyera negativamente en el resultado final del film.

Numero 1 en la lista de las grandes comedias de la American Film Institute y 14.º en la lista de las 100 mejores películas americanas, Some like it hot representa la madurez del screwball, género tontorrón que surgió en los 20 y que con los años iría progresando hacia las cotas más altas del humor absurdo creando cada vez tramas más complejas y trabajadas, pero sin dejar a un lado la carcajada.

Some Like it hot funciona como una hilarante parodia del cine negro, muy de moda en la época (para más información consultar a nuestro experto Andrés Aranda en su sección Noirmanía) y del que Wilder filmaría uno de sus máximas obras maestras  como es Double Indemnity (1944). A pesar del drama del incidente incitador, la película jamás pierde el chiste. Cuenta Wilder que en una película con tamaña cantidad de chistes (sin duda la película con más gags de su filmografía) era muy importante controlar donde el público iba a soltar una carcajada prolongada, pues se corría el riesgo de que se perdieran el siguiente chiste. Para ello se introducían parones en el dialogo, a través de situaciones o incluso de objetos, como la famosa escena de las maracas, donde Joe le cuenta a Jerry que se va a casar con el millonario Osgood, interpretado por un magnifico Joe E. Brown

"Besarla es como fumar sin tragarse el humo" "Pues trágueselo"

A pesar de que Lemmon y Curtis están absolutamente extraordinarios, la verdadera estrella de este film es sin duda Marylin Monroe, cuya belleza era proporcional al desquicie que provocaba en los directores de las peliculas que protagonizaba. Wilder comenta que en una escena en la que que Marylin tenía una sola frase («Where´s the bourbon?»), la actriz era incapaz de recordar el texto, teniendo que repetirla más de cincuenta veces. Pero estoy seguro que hasta Wilder olvidaba estos «pequeños»  problemillas cuando veía el resultado final en pantalla. Marylin se comía la cámara, desprendiendo una sensualidad que hipnotiza aún hoy en día y a pesar de sus kilitos de más, pues durante el rodaje la actriz estaba embarazada del escritor Arthur Miller, bebé que perdería meses después.

¡Mira eso!

Imposible borrar de la mente aquel culito saltando a causa del vapor en las vías del tren, ni aquel I wanna be loved by you, con su juego de luces que volvio loco a más de un espectador y, como no, a los censores, que sino metieron la mano en EEUU (el famoso codigo Hays se acaba de abolir) sí que lo harían en España, cortando más de una escena y cambiando en el doblaje algunas de las frases más picantes o de ámbito religioso  Pero la sutileza y el control que Wilder y Diamond le daban a sus historias hizo que la mayoría de chistes pasaran sin problemas la censura.

Tal era el control que Wilder tenía sobre sus historias, que no dejaba mover ni una de sus comas (por mucho que Lemmon lo intentara hasta llegar a irritar al director) y no es de extrañar viendo la perfección con la que esta escrita cada línea del diálogo. Curiosamente, una de las frases que menos estudiaron fue la famosa «No one is perfect» («Nadie es perfecto») que según Wilder se le ocurrió a Diamond y la cual dejaron en el guión a falta de nada mejor, sin saber que acabaría siendo una de las líneas más recordadas de su celebérrimo guión.

Bueno... nadie es perfecto

Osgood: Hablé con mamá. Estaba tan contenta que hasta lloró. Quiere que lleves su vestido de novia. Es de encaje blanco.
Dafne: Osgood, no puedo casarme con el vestido de tu mamá, seguro que ella y yo… ¡no tenemos el mismo tipo!.
Osgood: Podemos reformarlo.
Dafne: ¡No hace falta! Osgood, he de ser sincera contigo… ¡tú y yo no podemos casarnos!.
Ogood: ¿Por qué no?.
Dafne: Pues… ¡Primero porque no soy rubia natural!.
Osgood sonríe: No me importa.
Dafne: Y… ¡fumo! ¡fumo muchísimo!.
Osgood: Me es igual.
Dafne: Tengo un horrible pasado, desde hace tres años estoy viviendo con un saxofonista.
Osgood: Te lo perdono.
Dafne: Nunca podré tener hijos…
Osgood: Los adoptaremos.
Dafne : ¡no me comprendes Osgood! ¡AGGH! ¡SOY UN HOMBRE!.
Osgood: Bueno… nadie es perfecto.

 

3 comentario en “Estudio Billy Wilder (V): Some Like It Hot

  1. Pues a pesar de lo que cree todo el mundo, John Huston y yo pensamos que, además de ser el tren de todos los tiempos, Marilyn también sabía actuar; hay unos cuantos ejemplos. Lástima para ella que en casi todas sus películas se contratara al personaje, no a la actriz.

    1. No se si sabía actuar o no, lo que esta claro es que enamoraba a la cámara, don que según las malas lenguas (el malmetismo no empezó con Salvame) era producido por su miopía, que le hacía mirar al infinito de una forma extraña. Creo que la contrataban para que hiciese de ella misma (o de lo que el público pensaba que era) y así era dificil que demostrara su talento.

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