La cita donostiarra con el mejor cine alcanza su 60ª edición.
El Festival de cine más importante del país cumple 60 años en este 2012, y lo hace con una edición que, por lo que hemos podido ver hasta el momento, trata de navegar entre los mares del cine comercial y el de autor, entre los homenajes holliwoodienses que atraen a los fans de la alfombra roja y los autores de latitudes menos recurrentes con seguidores que miran a través de gafas de pasta (y sus diferentes grosores). Todo comienza el 21 de septiembre y Cinema ad hoc estará en la elegante capital guipuzcoana para contároslo pero, mientras llegamos a esa fecha, vamos a darle un repaso a lo que se podrá ver en esos nueve días.
Y empezamos por la inauguración como no podía ser de otra manera y es que la, en principio, poco atrayente propuesta para abrir el Zinemaldi no es otra que Arbitrage (El fraude si prefieren la versión española). Un thriller con cierto tufillo a «deja vu» protagonizado por dos ganadores del premio Donostia como Richard Gere y Susan Sarandon, ahora en la cuesta abajo de sus carreras, y por la siempre neumática Laetitia Casta. Dirige un cuasi debutante como Nicholas Jarecki, autor de un libro de entrevistas acerca de los inicios de algunos cineastas (Breaking In: How 20 Film Directors Got Their Start), del documental The Outsider, en el que también toca la problemática que rodea la creación de un film, y del guión de The informers, basado en la novela de Bret Easton Ellis (American Psycho). En definitiva, todo apunta a un proyecto alimenticio y que, eso sí, nos permitirá ver por el Victoria Eugenia a dos mitos como son Sarandon & Gere y que no optará a llevarse premio al participar fuera de concurso.
Ya metidos en harina concursal debemos repasar la nutrida participación española en esta sexagésima edición, empezando por El artista y la modelo de Fernando Trueba que, tras su incursión en la animación junto a Javier Mariscal de la mano de Chico & Rita, vuelve a la imagen real trasladándonos a la Francia de 1943 ocupada por los nazis dónde un viejo escultor, interpretado por Jean Rochefort, siente revivir su impulso artístico tras acoger a una joven española huida de los campos de refugiados, a la que da vida Aida Folch. Trueba parece querer insistir en la confrontación de vejez y lozanía que tan buenos resultados le dio en Belle Epoque, aunque el tono aquí parece más poético y menos aligerado por la comedia que en su oscarizada película.
También en blanco y negro (y muda) llega una de las más originales y esperadas propuestas españolas de la temporada y que tendremos la suerte ver en Donosti, se trata de la Blancanieves de Pablo Berger (Torremolinos 73), tercera recreación del año sobre el personaje creado por los hermanos Grimm (los amiguetes de Asylum nos han fallado en esta ocasión) y que nos transporta a la Andalucía de los años 20 con sus toreros y sus mantillas. Quizás si no fuera el año post The Artist diríamos que su condición de silente era una especie de salto al vacío pero claro, las cosas han cambiado. Protagonizan Maribel Verdú, Daniel Giménez Cacho, Inma Cuesta y Ángela Molina.
Uno que vuelve por San Sebastián es Javier Rebollo, que tras Lo que sé de Lola y La mujer del piano, ambas protagonistas en anteriores ediciones, presenta El muerto y ser feliz, una especie de road-movie por los extensos espacios de la Argentina actual de un asesino a sueldo (José Sacristán) que debe hacer frente al estado terminal de su enfermedad.
Para cerrar la presencia nacional en el Festival no podemos olvidarnos de tres nombres propios: Uno – El de Penélope Cruz, que repite con Sergio Castellito tras el éxito de No te muevas con Volver a nacer, y que en esta ocasión no hace de prostituta (!) sino de una mujer huida del asedio a Sarajevo que regresa a la capital bosnia con su hijo para mostrarle la ciudad sacrificada y el recuerdo de su padre fallecido, junto a Penélope, Emile Hirsch y Jane Birkin. Dos – Eduard Cortés que, tras enseñarnos como reventar un casino con The Pelayos, viaja a Argentina para contarnos la historia de un tronado atraco con las joyas de Evita Perón de por medio. Amaia Salamanca y Óscar Jaenada son, probablemente, los dos rostros más reconocibles de ¡Atraco!. Tres – Juan Antonio Bayona con su apuesta más internacional, Lo imposible, que con la llamativa presencia de Naomi Watts y Ewan McGregor encabezando el cartel promete colas y expectación en las puertas del Victoria Eugenia, veremos si luego está justificada. La historia, muchos ya lo sabréis, se centra en los intentos de una familia por sobrevivir al Tsunami que golpeó el sudeste asiático en 2004.
