28 de marzo de 2024

FICX 2012: Palmarés y balance

About the Pink Sky se va con el premio gordo de Gijón.

Polémica y algo destartalada, así fue la rueda de prensa de jurado y equipo directivo que proclamó a los ganadores de esta 50ª edición del FICX, un Director del Festival con ciertos problemas para decir cualquier palabra en un idioma que no sea el castellano, una portavoz (¿?) del Jurado que no da muchas más razones para justificar una elección de película ganadora que diciendo: «Es cine», otro miembro del Jurado con unas gafas de sol tras las que esconde los estragos de la noche gijonesa (no es que lo digamos nosotros) y que dice que no comparte en absoluto el triunfo de About the Pink Sky y abucheos de la prensa al ser nombrados varios de los ganadores fueron las notas destacadas de un palmarés que os desgranamos y del que, de lo más destacado, damos nuestra opinión a continuación:

  • Premio Principado de Asturias al mejor largometraje: About the Pink Sky – Keichii Kobayashi, Japón
  • Premio al mejor director: Lee Sang-Woo por Barbie, Corea del Sur
  • Premio al mejor actor: Yosef Carmon por Epilogue, Israel
  • Premio a la mejor actriz: Golshifteh Farahani por The Patience Stone, Afganistán
  • Premio al mejor guión: Amir Manor por Epilogue, Israel
  • Premio Gil Parrondo a la mejor dirección artística: Dragan Denda por Children of Sarajevo, Bosnia y Herzegovina
  • Premio especial del jurado: Beyond the Hills – Cristian Mungiu, Rumanía
  • Premio FIPRESCI: The Patience Stone – Atiq Rahimi, Afganistán

No tenemos nada en contra de la elección del film de Keichii Kobayashi, About the Pink Sky, como ganadora del palmarés gijonés principalmente porque, como especificamos nada más verla, nos fuimos del cine con la sensación de que algo se nos escapaba. No somos capaces a entender la elección del blanco y negro en una película de las características de ésta, donde entendemos empastaba mucho más con el tono una gama chillona de colores, tampoco nos entra en la cabeza el porqué del uso desproporcionado de los efectos sonoros, capaces de crear un buen dolor de cabeza con sus cacofónicos periódicos y sus alaridos juveniles al más paciente de los espectadores y, por último, no hemos desentrañado que nos pretendía contar Kobayashi con esta especie de cuento juvenil sobre la búsqueda de la felicidad, las elecciones morales o su retrato de la juventud japonesa, que cualquier cosa puede ser. Como somos gente respetuosa con lo que no terminamos de pillar pues damos por bueno el galardón aunque nos deja con la mosca detrás de la oreja las palabras de la locuaz portavoz del Jurado: «La hemos premiado porque es cine». Ahí va (ese bólido).

Mucho más difícil de digerir resulta el premio a la mejor dirección a Lee Sang-Woo por Barbie, de la que salimos de su proyección con bastantes ganas de abrir en canal… hasta que vimos en la puerta a su director que, con esa amabilidad oriental tan resultona, nos hacía una reverencia y nos daba las gracias por haber presenciado su película. Después de esas cosas se entiende que a uno se le caiga el alma a los pies a la hora de exponer sus múltiples defectos, pero su inclusión entre los ganadores por delante de otras opciones mucho más evidentes, como la de Aida Begic y su dominio del lenguaje en Children of Sarajevo no nos deja más opciones y es que Barbie es torpe, maniquea, naif y carente por completo de sutileza o habilidad. El giro (?) de guión que da el film en la mitad de su recorrido genera que la base misma de su argumento se venga abajo (no queremos dar detalles spoilers) y escenas como la risible persecución por la playa o aquélla en la que uno de los personajes, para deshacerse de un pasaporte, sube a la azotea de un edificio para arrojarlo desde allí (¿se va a romper o qué?) consiguen que nos cuestionemos si los miembros del Jurado y el grueso de la prensa tenemos la misma concepción de lo que significa el término dirección cinematográfica.

En la parte interpretativa ambos ganadores nos parecen dos opciones bastante lógicas, Golshifteh Farahani carga con todo el peso del relato en The Patience Stone, convirtiéndose en lo mejor de una película demasiado apegada a su antecedente literario, con poco de lenguaje propiamente cinéfilo en su entramado narrativo, algo que consigue apartarnos de la opinión mayoritariamente favorable a la candidata afgana a hacerse con el Oscar de la Academia, sí debemos destacar que este era un año especialmente fecundo en lo que interpretaciones femeninas se refiere e igual que la actriz iraní podían haberse ido de Gijón con premio la gritona Ai Kikeda por About the Pink Sky, Marija Pikic por Children of Sarajevo, Cosmina Stratan y Cristina Flutur por Beyond the Hills o Melanie Linskey por Hello I Must be Going. Tampoco era una opción descartable la de la veterana actriz israelí Rivka Gur por Epilogue, pero ha sido finalmente su compañero de fatigas en la cinta, Yosef Carmon, el que ha pillado cacho en forma de reconocimiento del jurado, en lo de las actuaciones masculinas el círculo era muy cerrado, o él o el amable gigantón danés Kim Kold por Teddy Bear, cualquiera de las dos opciones hubiera sido acertada y finalmente ha sido el hebreo, nada que decir, circulen.

Para terminar de repasar lo más destacado de este palmarés debemos hablar de la que para muchos era la mejor película y la favorita clara para hacerse con el Premio Principado de Asturias, la rumana Beyond the Hills. Creemos que el Jurado en su speech nos dio una pista de lo acontecido al afirmar que hubo una escisión entre sus miembros, tres de ellos apoyaban a la que resultó finalmente ganadora, About the Pink Sky contra dos que preferían otra cuyo nombre no fue desvelado pero que imaginamos sería el de Cristian Mungiu y sus monjitas, la prueba de esto es que la película del director de 4 meses, 3 semanas y 2 días se hiciera con el Premio especial del Jurado, una especie de consolación y que sirve para intentar poner de acuerdo a los contendientes en este tipo de pugnas. algo que parece no haber sido del todo efectivo, visto lo visto.

4 comentario en “FICX 2012: Palmarés y balance

  1. Suena a que querían darle un premio y al final, pues mira, quedaba esa categoría libre. Pero vaya, que no me jodan, rodar en una calle por la noche no es que implique precisamente una poderosa dirección artística. Igual era por el vestuario, que la prota siempre lleva su pañuelito puesto…

    1. Sí, si le hubieran dado el premio a la mejor dirección con ese estilo tan hiperrealista con el que rueda la Begic lo hubiera entendido y hasta compartido en realidad.

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