Adiós, FICX 51.
Termina una edición del FICX, la del año 2 después de Cienfuegos, y es el momento para hacer balance de un festival que parece haber superado la clásica crisis de transición para asentarse en otro lugar diferente del que veníamos, no sabemos si mejor o peor, algo que decidirá el gusto individual de cada aficionado, pero sí con cierta personalidad propia que no conseguíamos discernir tras lo del año pasado. Cierto es que esta nueva perspectiva, menos radical, cercana a un público más generalista, no concuerda, desde nuestro punto de vista, con lo que proclama su director Nacho Carballo acerca del afán de transgredir del certamen, basta con repasar la lista de películas de la Sección Oficial para encontrarnos con películas como Grigris, Little one, Blockbuster, Henri, Ilo, ilo, La distancia más larga o Gabrielle dónde, más allá de su variable calidad, encontramos un nexo en lo «amable» de su mirada, en cierta autocomplacencia disfrazada de progresía. Insistimos, esto puede gustar o no, no tratamos de hacer juicios de valor en este caso sino mostrar una tendencia que nos parece clara, recordemos que en la 49ª edición se vieron títulos como Dark horse, Fausto, Hors Satan, Michael, Play, Take shelter, The future, Vol special o L’apollonide, propuestas audaces en lo visual, lo temático o lo formal sin entrar en otro tipo de valoraciones cualitativas. Si el FICX elige esto de una manera consciente, desde un punto de vista de idea/concepto de lo que debe ser el Festival, o porque se valora la necesidad de expandir su público objetivo debido a los afanes económicos conocidos por todos es algo que sólo puede responder su dirección, nosotros nos limitamos a señalarlo. En cualquier caso nos alegra ver de nuevo las salas llenas, algo que no pudimos decir en el 2012 donde la caída de público y prensa se hizo tan evidente, para nosotros no es incompatible defender el Festival y analizarlo críticamente, de hecho ésta es nuestra obligación.
Ya entrando, ahora sí, en una valoración cualitativa del festi nos parece que ha superado con buena nota nuestras expectativas, consiguiendo un más que aceptable nivel medio con sus puntos negros, eso sí, sobre todo en lo tocante al cine español que parece haber dado la espalda a la muestra gijonesa. Nosotros, que estamos en contra de los juicios demagógicos e interesados que se suelen hacer sobre nuestro cine, seguimos sin entender el por qué puede aparecer una película como Blockbuster en la sección oficial, repitiendo la cantinela del año pasado con 88, Viaje a Surtsey etc. Estamos seguros que se pueden encontrar obras que no pequen de un amateurismo tan palmario y cuyos autores estarían encantados de traer a Gijón. Nos parece bien que este cine exista pero no que sea la Sección Oficial, la que concita más atención y espejo de lo que quiere ser el certamen, su lugar de acomodo. Por lo demás queremos destacar lo atinado del Jurado al no entrar en las frecuentes politiquerías tan presentes en los festivales y destacar con varios premios la que era, sin duda, mejor película de este FICX 51, os dejamos también nuestro top ten personal en el que hemos obviado las películas que hemos visto en otros festivales y la retrospectiva de nuestro querido Hong Sang-soo, salvo Our Sunhi que no existía posibilidad de haberla visto previamente, aquí va:
Top ten FICX 2013
- Ida (Pavel Pawlikowsky, Polonia)
- I am a ghost (H.P. Mendoza, Estados Unidos)
- Our Sunhi (Hong Sang-soo, Corea del sur)
- House with a turret (Eva Neymann, Ucrania)
- Cheatin’ (Bill Plympton, Estados Unidos)
- Pelo malo (Mariana Rondón, Venezuela)
- Floating skyscrapers (Tomasz Wasilewski, Polonia)
- Blue ruin (Jeremy Saulnier, Estados Unidos)
- Les apaches (Thierry de Peretti, Francia)
- My sweet pepperland (Hiner Saleem, Francia)
No podemos terminar este resumen sin agradecer al equipo de prensa por su ayuda constante y sus atenciones durante el Festival y muy especialmente a esos chicos y chicas que no suelen aparecer en las crónicas y que son los encargados de recibirte en taquilla, a la entrada de los cines o en la sala de prensa y cuyas sonrisas, en algunos casos espectaculares, te ayudan a sobrellevar las a veces largas jornadas de cine, gracias de verdad a todos ellos.
