Premios, películas y polémica.
La segunda edición del Festival Nocturna ha entregado sus premios, con mucha menos polémica que el año pasado en cuanto a los galardonados, pero sí con un alto grado de controversia con respecto a una cuestión totalmente subjetiva. Los compañeros que han asistido a la rueda de prensa de la lectura del palmarés, nos cuentan que no todos los directores o productores de algunas de las películas que se han proyectado este año, han sabido encajar bien las críticas hacia ellas, y se ha notado un cierto resquemor hacia quienes plasman sus opiniones de manera honesta. Estamos todos de acuerdo en que no es de recibo aludir a la vida personal de un cineasta para criticar que una película no haya gustado, como al parecer ha sucedido con la directora de Soulmate, y es algo que a título personal me parece reprobable siempre. Ahora bien, también sabemos todos lo mucho que cuesta hacer una película pero, ¿es por ello menos lícito expresar una opinión sincera de nuestra apreciación artística de la misma? Estamos en un festival de cine fantástico y de terror con todo lo que ello conlleva, y una de esas cosas, como también se ha dicho en la rueda de prensa, es que se proyecte “de todo” cualitativamente hablando. Pero por eso mismo, siendo conscientes de que no todo lo que se vea en un festival de estas características va a tener una calidad considerable, es tan necesario reconocer que no a todo el mundo le van a gustar ciertas cosas, como lo es el hecho de aceptar que quienes nos dedicamos a hablar de las películas que se proyectan tengamos la libertad para poder ofrecer nuestro criterio más personal a la hora de hacerlo.
Dicho esto, vamos con lo que nos ocupa que es nuestra crónica diária del festival. Como decía antes, hoy se han dado a conocer los premios de esta edición que esta vez han estado poco repartidos. El palmarés completo es el siguiente:
- Premio Nocturna Paul Naschy a la mejor película de la Sección Oficial: La Cueva
- Premio Nocturna a la mejor película de la Sección Dark Visions: Cruel & Unusual
- Premio Nocturna a la mejor película de la Sección Madness: Pinup Dolls on Ice
- Premio Nocturna al mejor director: Greg McLean por Wolf Creek 2
- Premio Nocturna al mejor guión: Greg McLean por Wolf Creek 2
- Premio Nocturna a la mejor interpretación: Ex aequo a John Jarratt y Ryan Corr, ambos por Wolf Creek 2
- Premio Nocturna a la mejor fotografía o efectos especiales: Extraterrestrial
- Mención especial del jurado: A la actriz Eva García Vacas por La Cueva
- Premio del Público: Savaged
- Mejor cortometraje internacional: Lothar
- Mejor cortometraje nacional: 24 horas con Lucía
Pero Nocturna no se acaba con los premios de las secciones a competición, y todavía quedan dos jornadas para disfrutar de más películas de cine fantástico y de terror. En la de hoy hemos visto tres películas muy distintas, entre ellas LA película que da sentido a toda una semana de festival. Pero más adelante hablaremos de ella, porque la primera del día ha sido Wolves, una película de y para adolescentes torturados que, en una línea similar a las de la saga Crepúsculo, nos presenta al chico más popular del instituto que descubre que es un hombre lobo justo cuando va a perder la virginidad (que no podía ser en otro momento, el pobre), y eso le causa un desasosiego interno tan dramático que cree haber asesinado a sus padres adoptivos y le conduce a escapar de la ciudad. En su huída llega a su pueblo natal donde el resto de la población también es licántropa, lo que por supuesto le facilita mucho las cosas, pero hay un jefe de una manada al margen de la sociedad lupina civilizada, interpretado por Jason Momoa, que luchará para echar de sus dominios al forastero. Ese es a grandes rasgos el argumento de Wolves, en el que no falta por descontado una historia de amor entre licántropos teenagers, que siendo de la misma raza hasta el sexo es mucho más fácil, dónde va a parar, y tampoco una tragedia familiar que da más sentido a ese drama profundo que sufre nuestro protagonista. Con algunas pinceladas de humor negro (pocas) y un mucho de luchas entre hombres lobo, Wolves es como digo carne de saga adolescente con la que algunos se han echado unas risas no pretendidas y otros casi nos dormimos.
Después de asistir a la entrega del premio Maestros del Fantástico al director italiano Dario Argento, la duda estaba entre si quedarnos a ver uno de sus clásicos, Profondo Rosso, o arriesgarnos una vez más con la que se anunciaba como la primera película interactiva y transmedia española. A estas alturas de festival, la decisión estaba clara, quien no se arriesga no gana y en este caso hemos ganado muchas risas. No tengo muy claro si la provocación de las risas entraba dentro de los planes de los responsables de Panzer Chocolate, pero a medida que voy pensando en ella creo que no es una idea muy descabellada. De otra manera no se entendería que se tome en serio una película en la que, si ya de por sí el argumento es un delirio en sí mismo: un escondite nazi en mitad de los Pirineos donde hay toneladas de chocolate con metanfetamina desde tiempos de Hitler, y un ¿monstruo? ¿fantasma? nazi que cobra vida para matar a quien ose introducirse en su guarida, el desarrollo del mismo tiene tantas lagunas y tantas incongruencias que es imposible pensar que no esté calculada simplemente como un divertimento sin ningún tipo de lógica. Eso sí, ha habido algún que otro incauto que se ha hecho con la aplicación, de pago, para poder tener el móvil encendido durante la proyección y poder interactuar con la protagonista.
Tras la entrega de premios la proyección del adelanto de la nueva película de Nacho Vigalondo, Open Windows, la última decisión del día ha sido la mejor que hemos tomado en todo el festival, la de perdernos la tan esperada The Raid 2 para ver Found. Avalada por 36 premios internacionales en festivales de todo el mundo, Found ha llegado a Nocturna para quedarse en la memoria colectiva de todos los que la hemos visto. Una película a la que se le nota el bajo presupuesto a nivel técnico, pero que compensa con creces con la originalidad de su propuesta tanto argumental como narrativa. Found es la visión de Marty, un niño de 12 años apocado que sufre acoso escolar por parte de matones e incluso de su mejor amigo, que tiene una madre que parece estar ausente siempre que se traten cuestiones importantes en la familia y un padre autoritario que está más pendiente de la televisión que de los problemas que puedan tener sus hijos. Marty descubre que su hermano mayor, el único que le escucha y se preocupa por él, es un asesino en serie que guarda las cabezas de sus víctimas en su bolsa de bolos. De entrada, la sinopsis puede parecer presagio de un slasher con humor negro, pero nada más lejos. Estamos ante una película que invita a la reflexión, que nos ofrece en todo momento la visión del niño no sólo ante el hecho de que su hermano sea un psicópata asesino, sino también sobre el mundo que le rodea y del cual va empezando a ver que la crueldad no sólo proviene de actos como los que realiza su hermano. Reflexiones como el racismo, la existencia de Dios, o sobre si la herencia recibida genéticamente o en cuanto a educación familiar es transmisible o no, forman parte de una de las películas más interesantes que hemos visto en mucho tiempo, y desde luego la película con mayúsculas de este festival. Tarde pero a tiempo.
