FICX 50: Análisis final

Tras conocer todos los datos, hacemos nuestro balance final del FICX.

Ayer se presentaban (por fin) las cifras de asistencia a la controvertida 50ª Edición del Festival Internacional de cine de Gijón, algo que llevábamos esperando desde hace tiempo para poder hacer un resumen global, un balance de todo lo que hemos vivido este año tanto a nivel artístico como de público, prensa y otros factores. El primer año tras el cambio de dirección, el primer año tras la ruptura de un certamen que se consolidaba, edición tras edición, como uno de los más destacados del país a nivel de asistencia y aceptación.

– Las películas: Luces y sombras, aunque consideramos un acierto la inclusión de AnimaFICX, la sección dedicada al cine de animación en este Festival y donde hemos podido ver algunas de las obras más destacadas de esta forma de expresión cinéfila de los últimos dos años, las carencias en la Sección Oficial eran claras y evidentes, algo que dentro de la misma organización se reconoce off the record, ¿de qué sirve negar que muchos autores y distribuidoras han hecho efectivo el veto anunciado tras el cambio de dirección? ¿por qué afirmar en público que se tiene el festival que se quiere cuando en privado se reconoce que se tiene el que se puede? La participación del cine español en el certamen ha sido especialmente dolorosa, con tres obras muy por debajo de lo que se supone debería ser el nivel mínimo exigido para un Festival como el gijonés, desechos de tienta u obras rozando lo amateur, un completo desastre.

– Público: El Festival ha perdido un 20% de asistencia, frente a los 75.000 del 2011 en este 2012 la cifra se sitúa en torno a unos 60.000. Podemos entender el descenso debido a la fractura que supuso el cambio de dirección, lo que no entendemos son las peregrinas excusas que se dan desde la organización, achacándolo todo a la crisis… como si el 2011 hubiera sido un año de bonanza económica, de todas maneras, asumiendo como cierta esa mentira ¿Cómo se explica que en este año de crisis el Festival de San Sebastián se mantenga con 157.000 espectadores, sólo un 0’85% menos que el 2011? ¿Cómo se explica que el Festival de Sevilla haya batido records de asistencia y recaudación con la llegada de Cienfuegos superando masivamente a Gijón? ¿La crisis sólo golpea en Asturias? Ya es mala suerte. En serio, ¿tan difícil es hacer un análisis riguroso y que no se derrumbe como un castillo de naipes ante la más nimia de las investigaciones? Qué lástima.

– Prensa: Nacho Carballo en sus comentarios pre-Festival, cito textualmente:

• ¿Cómo será la cobertura de la prensa? ¿Se mantiene el número de personas acreditadas de años anteriores?
• Sí, se mantiene el nivel de personas acreditadas de años anteriores. Quizá, gracias a la polémica que hubo, tendremos más prensa que nunca.

Esto se decía sólo unos días antes de comenzar el FICX, pronto fue un hecho para todos los habituales que esta afirmación era radicalmente incierta, era suficiente con asistir a cualquiera de las proyecciones para la prensa de las películas a competición y ver las salas a una cuarta parte de su capacidad, así que de nuevo debemos preguntarnos: ¿por qué no decir la verdad? Podría resultar lógico y se ganaría nuestro aplauso el reconocimiento de un desinterés comprensible por parte de la prensa ante las dudas generadas, al menos podríamos valorar la sinceridad y no que venga la realidad una vez más a derrumbar nuestro castillo de naipes, hoy no les ha quedado más remedio que reconocer el descenso de medios acreditados y desmentir al director del Festival para de nuevo culpar al comodín de la crisis, ése mismo que ha incrementado los medios de prensa presentes en Sitges, San Sebastián o Sevilla, la crisis una vez más, sólo se ciñe a nuestra ciudad ¡Qué perra suerte!

– Organización: No queremos ser injustos y culpar a la organización del cúmulo de desgracias que parecen haberse cebado con el Festival, déjenme hacer lista: películas de la Sección Oficial que se caen a última hora del cartel, jurados que cancelan su estancia también en el último momento, proyecciones fallidas y que deben ser canceladas, letreros que se caen encima de señoras. No sabemos qué porcentaje de responsabilidad compete a la organización de todos estos desmanes y cómo no lo sabemos preferimos no valorarlos y solamente enumerarlos. En la parte que nos toca sí queremos agradecer a la oficina de prensa por su amabilidad y simpatía, algo poco frecuente cuando nuestros artículos han sido tan críticos como creíamos que debían ser, que desde las redes sociales del FICX se ignoren nuestras crónicas era algo con lo que contábamos y que nos enorgullece, al menos nos han leído, gracias por eso. Los RT no los necesitamos, tenemos lectores de sobra.

No queremos terminar este balance sin saludar a los que probablemente estén pensando que dar nuestra opinión crítica sobre el Festival supone algo así como asestarle una puñalada, nosotros asistíamos, asistimos y seguiremos asistiendo al Festival, y mostrar una opinión no es atacar el certamen sino los errores que se cometen y que creemos pueden mejorarse: ¿o acaso no es cierto, Nacho Carballo?