10 de octubre de 2024

Críticas: La lava en los labios

La lava en los labios

Más #Littlesecretfilm en CAH.

Jordi Costa es una especie de padrino para muchos de los que escribimos articulillos sobre películas. Es esa persona que notas que se dedica a lo que le gusta y que no te la imaginas haciendo otra cosa; no te imaginas a Jordi Costa vendiéndote el pan o mirándote un bulto que te ha salido en alguna parte. O igual sí te lo imaginas e igual el sí se lo imagina, porque hace muchas cosas aparte de escribir críticas. Escribir libros, guiones de cómics, salir en Go, Ibiza, Go!… y también rodar un #LittleSecretFilm y de eso se va a hablar ahora.

Para los del búnker que están esperando a mañana, cuando empiece la guerra y sólo se informan a través de Cinema Ad Hoc (cosa lógica) contaré de qué va lo de los #LittleSecretFilms mencionando sus reglas y sin mencionar el manifiesto Dogma95. Vaya, lo he hecho. Lo siento. Son films pensados para rodarse de manera improvisada en menos de 24 horas ininterrumpidas, sin publicitarse, con un equipo técnico no superior a 10 personas y con el objetivo de estrenarse online y no sacar un duro. Por si os aburrís en el búnker: http://littlesecretfilm.com/LittlesecretfilmManifiestoCastellano.pdf

La lava en los labios 2

Dos párrafos. Jordi Costa + #LittleSecretFilm.

Lo primero que se resiente en una obra rodada de este modo y es lo que nos hace ver en un instante que la producción ha sido “barata” es la fotografía. No ha habido preparaciones interminables de cada plano con dobles de luces y desde luego no ha habido maratonianas sesiones de postproducción con el colorista (mirad a Wong Kar-wai, le enganchó el rollo y se tiró como tres años así, “ay, no, bájame los blancos”). Pasado el choque inicial ante un producto de este tipo nos adentramos en una historia llena de mujeres y de misterio. Castiza sin esos excesos que gritan a pantalla “Mirad qué castizo”. Llega un momento en el que comienzo a delirar en la butaca, ante esos diálogos extraños, esas situaciones cinéfilas. En mi delirio recuerdo la pipa que no es una pipa de Magritte. PUEDO ver la película que hay detrás de la película, porque lo que vemos es la representación de otra.

Hay más de lo que se espera, no cae en la verborrea surrealista y verdaderamente hay un misterio y un algo inquietante. La sombra de un crítico planea sobre una historia repleta de mujeres. El resultado final no es el mejor pero contiene un par de escenas potentes y dos desgarradoras piezas musicales. Es loco, es precipitado, no es una película… pero es un #littlesecretfilm.

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