26 de abril de 2024

Americana Film Fest 2020: Crónica 1

El cine indie americano vuelve a Barcelona.

Séptima ocasión en que los Cines Girona de Barcelona se visten de gala para acoger lo mejor del cine indie estadounidense de los últimos meses con el Americana Film Fest. Ahora bien, este año amplían fronteras a toda América del Norte y en su programación también se incluyen películas de Canadá y México, así pues, los últimos trabajos de Xavier Dolan o Gael García Bernal se codearán con las veneradas Honey Boy o The Beach Bum. Todas ellas serán objeto de análisis en la siguiente crónica, pero en la presente abordamos algunos de los títulos más destacados de los primeros días. Tres historias con tres grandes personajes que no dejarán a nadie indiferente con su radicalidad a la hora de abordar ciertos temas.

La primera de ellas es Swallow, una fascinante crónica de la expiación de un trauma enquistado. Hunter es una joven ama de casa que, al quedarse embarazada, empieza a ingerir objetos peligrosos para su cuerpo (canicas, tornillos, clips…). No hay razón aparente, su marido y suegros intentan ponerle remedio, pero la fuerza visceral de Hunter es mayor. El filme, primer largo de ficción de Carlo Mirabella-Davis, resulta en todo momento magnético gracias sobre todo al minucioso estudio de la psique de la protagonista y al excelente uso del sonido y el color que realza la atmósfera inquietante que rodea el microcosmos de Hunter. Extrañamente cómica en el comportamiento de la protagonista, la película también es capaz de dejar un poso emocional una vez se descubre la terrible verdad, el origen de ese dolor enquistado y guardado bajo llave. La escena de ella y Denis O’Hare es inusitadamente conmovedora. Swallow nos obliga a seguir la pista a Haley Bennett que ofrece una soberbia interpretación, premiada en el Festival de Tribeca. Sin lugar a dudas será una de las mejores películas de esta edición.

Thunder Road

Aunque también parte del trauma, la muerte de la madre del protagonista, Thunder Road se sitúa en el polo opuesto: aquí estamos ante una excéntrica y ridícula comedia en torno al patetismo de Jim Arnaud, un agente de policía que entra en un período de catarsis emocional al afrontar esa pérdida. Jim Cummings dirige, escribe y protagoniza su debut partiendo de su propio cortometraje, el cual era la divertida primera escena de la película, un alocado y extravagante discurso en el funeral de su madre. Un arranque que marca el tono imperante del filme y sienta las bases de los altibajos posteriores, pues la fórmula no funciona con el mismo ahínco en todas las secuencias y agota sus ideas a marchas forzadas. Pese a todo, la propuesta de Cummings es efectiva a lo largo de todo el metraje y resulta mucho más inspirada en su vertiente de comedia desvergonzada que no en el drama de la crisis existencial de un hombre corriente.

Eso sí, más carcajadas se sueltan con Perdona que te moleste, la opera prima del rapero y activista afroamericano Boots Riley. Una comedia con tintes fantásticos y sci-fi que bascula entre lo delirante, lo salvaje y el derroche imaginativo para cimentar una desternillante y feroz crítica al racismo estructural, al sistema laboral del capitalismo y a la crisis de valores en Occidente. Cassius Green es un joven vendedor telefónico con problemas de autoestima que ansía con llegar a lo más alto del estatus social, es decir, aspira a tener mucho dinero, una gran casa y vivir sin preocupaciones salariales. Buscando la felicidad en el éxito y la abundancia mientras obvia los pequeños placeres y desoye a sus seres queridos. Su vía para conquistar ese cielo es tan escalofriante como satírica: imitar la voz de un blanco para lograr más ventas y poder ascender profesionalmente. Es decir, despojarse de la propia identidad para encontrar su lugar en un mundo idílico, pero prefabricado y cimentado en fachadas que se derrumban en un santiamén. No todos los espectadores se encontrarán a gusto ante una comedia tan radical en sus formas, pero cuando uno entra disfruta a lo grande con una de las comedias contemporáneas con mayor sátira, sin mensajes masticados y con una propuesta visual y narrativa acorde con su deconstrucción de los estragos del capitalismo salvaje y la resignación de los ciudadanos a un sistema adverso a su porvenir. Irregular, pero ante todo, brutal. Perdona que te moleste está disponible en Movistar + para que podáis disfrutarla sin estar presentes en el Americana Film Fest.

Perdona que te moleste

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