Recordamos el multipremiado cortometraje de Juan Pablo Martín Rosete.
Martín Rosete, uno más de esa fuente inagotable de cineastas que es la New York Film Academy (NYFA), cuenta que un día no pudo ir a una de sus clases de crítica literaria. Al día siguiente, como buen estudiante, pidió el texto que se había analizado el día anterior. Para su sorpresa el relato era de una sola página y estaba firmado por uno de esos autores polacos de nombre impronunciable, Slawomir Mrozek. El escrito cuenta la historia de un hombre que siente el tormento existencial al no saber como ubicar los muebles de su habitación y de cómo, al moverlos de sitio, y tras un pequeño momento de confort, vuelve a sentir que su vida es aburrida y tediosa. Estos pocos párrafos enamoraron a Rosete que tras hacerse con los derechos de la historia y conseguir ganar el Proyecto Corto de Canal+, se lanzó a la aventura de rodar su primer cortometraje en 35 mm.
Revolución es una de esas películas donde en cada visionado se descubren cosas nuevas, diferentes puntos de vista, diferentes metáforas existencialistas que no hacen más que enriquecer la obra final. El texto de Mrozek, tan bien adaptado por Rosete, está plagado de una ironía repetitiva que propicia el despertar de la mente del espectador hacia lo que está viendo: nada, sólo un maravilloso resumen del pensamiento del hombre a lo largo de la Historia en unos escasos siete minutos.
Revolución ha sido galardonada en multitud de festivales, tanto nacionales como internacionales: 47ª Seminci de Valladolid (Premio del Público), IX Semana de Cine Ibérico de Badajoz (Premio del Público), VI Certamen Internacional de Cortometrajes País de Bidasoa (Primer Premio del Jurado), IV Festival Joven de Cine Español de Albacete (Premio del Público), V Belo Horizonte International Short Film Festival (Brasil) (Premio del Público), 18º Festival Européen du Film Court de Brest (Francia) (Premio del Público), 29º Festival Internacional de Filmets de Badalona (Mejor Director Menor de 25 años)…
para reflexionar…