Os contamos lo que se verá en el Festival de Cine Alemán.
Un año más, y ya van 18, vuelve el Festival de Cine Alemán fiel a su cita con Madrid. En esta nueva edición, que se celebrará del 7 al 12 de junio, podrán verse 16 largometrajes, 4 cortometrajes que se verán junto a determinadas cintas, y el pase especial del Short Tiger Next Generation, que ya empieza a convertirse en un clásico para los amantes de los cortos y los jóvenes creadores.
Entre los largometrajes que tendremos oportunidad de disfrutar destaca el que abrirá la edición de este año, tras su paso por la última Berlinale, Fukushima, mon amour de la directora Doris Dörrie. Dörrie, vuelve a Japón después de su aclamada película Cerezos en flor (2008), esta vez para narrarnos la historia de una joven que, intentando huir de sus sueños rotos, se embarca en un viaje para conocer los efectos devastadores de la triple catástrofe de Fukushima. Además de este título, otro de los grandes esperados es, sin duda, el documental Fassbinder, en el que su directora, Annekatrin Hendel, se propone revelar el alma del director alemán apoyándose sobre todo en la intervención de su colaborares y amigos, haciendo un recorrido por los momentos más decisivos de la vida del cineasta.
También habrá espacio en el festival para los dramas. Podremos navegar por los más convencionales como Herbert, donde veremos a un ex boxeador venido a menos al que se le diagnostica una grave enfermedad, o Refugio, debut en el largometraje de Marc Brummund y que nos adentrará en los internados de educación cristiana, activos en la Alemania occidental hasta mediados de los sesenta; pasando por obras de carácter más simbólicas como Salvaje en la que asistimos a la metamorfosis de su protagonista, y aquellas que caminan por el filo de la realidad y la fantasía como En la casa de las telarañas de la joven debutante Mara Eibl-Eibesfeldt, que nos cuenta como unos niños sobreviven al abandono de sus padres.
Pero no todo será tan denso ya que podremos rebajar tensiones con comedias como Mi vida a los sesenta, que tiene previsto su estreno en agosto en nuestros cines, y cuyo título lo dice todo por lo que poca explicación necesita, y Yo y Kaminski en la que el director Wolfgang Becker vuelve a contar con Daniel Brühl, como ya lo hiciera en la estupenda Good bye, Lenin (2003), que encarna a un crítico de arte que aspira a convertirse en el biógrafo de un pintor vanguardista ciego. La terna de comedias se cierra con Ha vuelto, basada en la novela homónima de Timur Vernes y que se convirtió en un best seller. Su director, David Wnendt, lleva a la pantalla lo que nos plantea la novela; qué sucedería si Adolf Hitler regresase a la vida en 2014. También hay cabida para el thriller con Nosotros los monstruos, en cuyo arranque una hija le confiesa a su padre que ha cometido un acto delictivo, dejaremos que veáis en la pantalla de qué se trata, y a partir de ahí se adentra en una espiral de “padres al rescate” que ya veremos en qué acaba.
Los más pequeños también tendrán su espacio en el festival y podrán ver Rico, Oscar y el misterio del bingo. Se trata de la segunda adaptación cinematográfica de los premiados libros infantiles de Andreas Steinhöfel, secuela de Rico, Oscar y las sombras profundas, que se proyectó en la edición del festival del año pasado.
Este año el Festival dedica su ciclo habitual a la Movida berlinesa, que también la hubo como en Madrid, bajo el título “Slut, sound & punk”, y en el que se podrán ver tanto documentales como largos de ficción. Dentro del primer grupo tenemos Esto no es California (2011), que nos cuenta las andanzas de unos skaters en la década de los 80, que en la RDA representaban un peligro público al ser considerados una subcultura anarquista y B Movie: Lujuria y música en Berlín Occidental 1979-1989 (2015), en el que cuatro directores, retratan la energía y el caos de Berlín en la última etapa de la guerra fría. En el segundo grupo se encuadran Muerte a los hippies! Que viva el punk (2015) en la que Oskar Roheler, director de La partículas elementales (2006) lleva al cine su novela autobiográfica “Mi vida de imbécil” para contar las peripecias de un chaval de 19 años que, harto de la hipocresía hippie, huye al Berlín occidental en busca de otros espíritus rebeldes, y Coming Out (1989), única película de la DEFA (compañía cinematográfica estatal de la República Democrática Alemana) que abordó el tema de la homosexualidad de una forma abierta.
Y como no solo de largometrajes vive el cinéfilo, no podían faltar los cortos, con 4 títulos que se proyectarán antes de determinadas cintas: La vida es dura, Lobo, Arts and crafts spectacular #3 y Butter brioche; y una proyección especial de cortometrajes, que tendrá lugar el viernes día 10 a las 22:00 horas, la esperada Short Tiger 2016 Next Generation. En esta proyección se darán a conocer los ganadores de los cortos alemanes más creativos del año de menos de 5 minutos (el certamen Short Tiger) y los cortos más representativos de los estudiantes alemanes con duración máxima de 15 minutos (la serie Next Generation). Podremos disfrutar de un total de 12 cortos con una gran variedad de estilos y de temáticas que van desde robos en el Louvre, piscifactorías noruegas, genios del piano que enloquecen por culpa de un conejito, búsqueda de nuevos planetas para ser habitados por el hombre, príncipes que llegan tarde a clase, mujeres que esperan a la persona amada intentando no desesperarse en el intento, poetas que son soldados…
Y para el final hemos dejado lo que consideramos la “joya” del festival. La posibilidad de ver una peli de Fritz Lang en pantallón. FRITZ LANG EN PANTALLÓN, lo habéis leído bien. Se trata de Der Müde Tod (1921) o lo que es lo mismo La muerte cansada, o lo que es lo mismo Las tres luces, peli muda de uno de los grandes genios del expresionismo alemán y que pensamos disfrutar como si no hubiera un mañana. La película estará sonorizada en directo por el DJ francés Raphaël Marionneau que pasó meses seleccionando la banda sonora, en la que mezcla música clásica con música electrónica. Seguro que resulta toda una experiencia.
Ya solo nos queda sentarnos y disfrutar.